Poets in arms*

A Juan Carlos Higa

Desgarro en el parto, la hija de las luces. Aunque es vida, alguien la pone en tus manos como si fuera un regalo. Un presente. Y cuando se va, quedan sus huellas, las manchas de nacimiento.

Nace llorando; ni de dolor, ni de tristeza. Es su verdad la única que puede gritar.  Nace con los ojitos abiertos y te mira. Vos la ves. Si tenés miedo, es normal… debe ser el fantasma. Si no sentís el escalofrío podés cerrar los ojos y hacer como si nada. No pasa nada. No pasa nada.

Volvamos. Volemos juntos si miramos el mismo destino. Así suena tu voz cuando cantás las coordenadas. Tus palabras palomas y la otras, desplumadas de tanto atravesar tejidos, picotean el germen, y van y vienen, ponen huevos y se quedan para siempre… en todos. En los que abrigues, en los que alcances. Se anidan en los sueños de las almohadas y se despiertan cada mañana al salir el sol.

Mensajes, como simples secuencias de letras. Pero tuyas. Yo se que sí. Aunque digas que son de todos, incluso mías si quisiera. 

Camino a hacia la estrella y me aferro a tus manos. Únicas, ahora sí. Suaves y delicadas como tus versos. Tan tibias, y en las venas, encerrada la sangre corre con la fuerza de tus convicciones. Imparable, como tus versos. La aspereza marcada justo ahí, donde se acomoda la birome o cualquier cosa que tengas cerca para partirte.

Y todo eso en mis manos. Todo eso. Vida, regalo, presente, grito, sangre, versos, palomas, sueños, vos.

Cerca.

Y todo eso, rozando mi piel, se escurre y se pierde dentro mío. Siento el calorcito que comienza a fluir.

Peligrosa es la posesión de la inconsciencia.

Ya no sé que estoy tocando. Ahora no es tuyo, es mío y lo defiendo.

Rr, Rr. Con estos versos erre. Con estos versos realidad. Con estos versos recuerdo. Con estos versos rompemos cadenas. Con estos versos renacemos pichones de fénix. Con estos versos erre hasta estallar el corazón. Con estos versos erre hasta quebrar la voz. Con estos versos RJW una vez me penetró y nunca más lo saqué por miedo a morir desangrada. Con estos versos doble erre Nicolás Guillén y César Vallejo. Andá a decirles a ellos que no se puede R. Andá a decirles que no se puede. Con estos versos me encuentran, con estos versos exploto. Erre, Rr, Rr. Que arrojen las armas al suelo. De un poema bellamente subversivo, el filo de la hoja no es exactamente lo que puede provocar una herida mortal. Rr, los poetas apuntan y disparan. Cantan. Rr. ¡Erre desarmados! ¡R! Aniquilar la R. Desamados. Versos errados; desalmados.

Alfa, omega, R. R otra vez, de regreso. R de volver cada vez. Re volver.

Con estos brazos,

Tocamos el cielo,

Ojos abiertos,

A un sueño eterno.

R de evolución.

*Poetas en brazos. 

“No Desaparece Quien Deja Huella” 
Muestra sobre los detenidos-desaparecidos nikkei[1] durante la última dictadura militar.
Se realizará en la sede de la Asociación Japonesa en la Argentina, Independencia 732, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, del 10 al 12 de junio de 2011.  
Esta muestra es una realización conjunta del Instituto Espacio para la Memoria y los Familiares de Desaparecidos de la Colectividad Japonesa ycuenta con el auspicio de la Embajada del Japón y la Asociación Japonesa en la Argentina.  
La misma será inaugurada el viernes 10 de junio, a las 18.30 hs. El cierre del acto estará a cargo de Víctor Heredia. 
Los días 11 y 12 la muestra estará abierta al público de 15.00 a 21.00 hs.

"LAS HUELLAS VA A IR APARECIENDO HASTA ALCANZARNOS A TODOS"