viernes, julio 28, 2017

Guardia de 24 horas.

Si estuve mucho tiempo en silencio,
si fueron muchos años los que no dije nada
fue porque esperaba el mometo justo
para cantar por vez primera
con voz clara y serena
con hambre y poesía
con el idioma del alma
con los miedos y certezas
con locura y seguridad
con la inconsciencia y la inocencia...
Conjugar el verbo amar.
Resultó ser que la palabra, no era lo primordial.
De mil maneras y en mil idiomas.
De instantes estamos hechos
y ahora compartidos.
Mil sol sale cada mañana con tu saludo
de buenos días,
y mi noche cae después de escuchar tu voz
que me lleva a soñar profundo
donde nos volvemos a encontrar.
"¿te gustan las sorpresas?" me preguntaste picarón
"voy a aparecer un día en la puerta de tu casa"
Todos los días me enamoro, todos los días te elijo.
Me mandaste un mensaje a media mañana
y entre tanto ginecólogo, obstetra y cachufleta
dando vueltas
una lagrima se me escapó.
Y te pido perdón amor,
si crees que mi trabajo no es fácil...
el tuyo es mucho mas duro, y lo sé.
A la distancia me acompañas todos los días,
y me esperas
y me escribís sabiendo que no te voy a poder contestar
y cuando logro encontrarte
ya no soy yo... soy los restos de mí...
y te cargo
con todo mi cansancio, con todas mis inseguridades
con todos mis muertos y todos mis nacimientos
con toda mi melancolía...
Y vos, doctor amor...
además de fumarme
juntas mis pedacitos y con toda tu ternura
los cosés, los pegás,
y me limpias toda la mierda con tu pervinox
que los bordes afrontados y sin signos de flogosis
(y la madre que no los parió)
me abrazas, me sostenes, me devolves
y encima me halagas con tu orgullo sincero
aunque un poco inflado...
sobre lo poco que hago
y lo mucho que digo.
Tu guardia; veinticuatro horas, incesante
de amor continuo, día tras día
de protección y mimos
de compañía y lejanía...
Eso sí que no es para cualquiera.
Eso es amor.


No hay comentarios.: