Otra vez, 1ero de diciembre.

"Siguiendo las enormes conjeturas de la prensa, deseo confirmar que el test de HIV me ha dado positivo y tengo SIDA. Sentí correcto mantener esta información en privado para proteger la realidad de los que me rodean, pero ahora llegó el momento en que mis amigos y fans de todo el mundo sepan la verdad y me compañeñ a mí, a mis doctores y a todos los que luchan en el mundo contra esta terrible enfermedad"

Freddie Mercury.

The show must go on
I´ll face it with a grin
I´m never giving in
On-with the show-
I´ll top the bill, I´ll overkill
I have to find the will to carry on
On with the
On with the show
The show must go on.

Si me preguntaban hace años atrás que quería ser cuando fuese grande, realmente mi niña no sabría que contestar. Sí claro, desde ya, a penas iba a los asaltos para bailar los mejores cuartetos cordobeses, pero ya tenía en claro sus pasiones que se iba acrecentando.
Fue una sumatoria de cosas... mi carácter sedentario, mis amigos los libros, una buena profesora de lengua, el descubrimiento de mi camino hacia la izquierda, la buena musica...
En poco tiempo, tendría alrrededor de 11, 12 años, cuando descubro la maravilla que es queen, me enamoro de sus melodías, y al mismo tiempo me entero que el cantante se había muerto años atrás, muchos. Con esa edad, no era conciente de lo que eso realmente significaba, ni de qué era la causa de su muerte. Así que llegaba a casa, ponía Don´t stop me now a todo volumen y cantaba con Freddie su cancio hasta quedar afónica.
Fue tiempo después, esta grandiosa profesora de lengua, de la que aprendí muchísimo, nos explica lo que se recuerda todos los primeros de diciembre. Fue no hace mucho, 2002 creo. Desde allí, todos los primeros de diciembre llevo un lazo rojo en mi pecho.
En ese momento, justo ahí, en la flor de la edad, en la danza de las pasiones inconcientes y de los amores responsables, si alguien me hubiese preguntado qué haría de grande, hubiese confesado con ingenuidad pero segura: Vengar a Freddie. Maldito aquel que se lo llevó, ahora voy a tener que esperar hasta la muerte para oírlo en un recital en vivo.
Es lo que hago desde entonces. Ya me incorporé al ejército del lazo rojo.
Ya leí a Dominique Lapierre, a Marta Dillon, Philadelphia, ya vi "Y la banda siguió tocando", ya escuché "Last song" de Elton John, ya busqué, ya escribí, ya me asusté... ahora voy por el remedio, por la calma, por la cura, por la mejoría, si mi pasión también es la sanidad, si mi tao me lo permite.