martes, noviembre 25, 2014

el club de las tegobi.


Las bigotudas tenemos un enemigo... el espejo. Mas vale cerrar los ojos que encontrar una ocasión para agarrar la pinza con paciencia o la cera con sufrimiento. Es un invento malparido. 
Como lo tenía ahí juntando mugre y necesitaba un lugar para escribir datos, lo convertí en pizarra. No es lo más afortunado, pero le doy mas uso. 
Ayer vinieron mis primitas y estuvimos jugando al ahorcado con mi ahijada. 
No sé en que momento sucedió, pero cuando me fui a dormir vi mi nombre escrito en manuscrito y un ahorcado resuelto "HOLA". Y morí de amor lentamente.

2 comentarios:

Akichan dijo...

Bien a lo Frida :P

Jota Pé Shinzato dijo...

jaja siiiiiiiiiiiii