Al ritmo de una milonga con acento japonés bailaban furiosas las gotas gruesas de la lluvia que nos hacía bacilar en ir al punto de encuentro, ¿Cuál es la capital de Buenos Aires?
Estábamos, amando la tormenta, y yo en el medio, esperando la hora bajo el paraguas violeta con lunares blancos, porque no quiero decidir, espero que el viento elija mi dirección.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario