martes, junio 22, 2010

Hasta cansarme de vos.

Qué lindo texto Lee.
No es el placer de sorberlo y saborearlo. Debe ser más, el agrado de fumarte. Reencontrar tus letras por sorpresa. Como cuando uno se deprime porque cree que ya lo vio todo y descubre una lucecita que se perdió por ahí. Una luz de ese bosque inmenso y hermoso.
Dicen que la poesía cobra vida cada vez que se lee.
De "Cosas que suicidan"
Yo soy la china del I Ching. Al pedo, no sé interpretar. Occidente no puede de ese modo. Pero igual insisto cuando se me agotan las fuerzas, recurro a las monedas.
En este momento tengo ganas de volver a leerlo, y calentarme la garganta con una copita de licor de ume.
Este... creo que lo voy a hacer.
En este momento.

1 comentario:

Melina Matumoto dijo...

Qué lindo, amiga, que te despierte tantas pasiones. Debe ser imposible no enamorarse de él cuando sabés que es un mortal y cada cosa que descubrís te deslumbra. Eso debe ser lo más difícil, no? Esa línea delgada entre la genialidad que le encontrás, y el hecho de saber que es un ciudadano común y corriente que toma el bondi a la mañana, trabaja, tiene hobbies, como cualquier otro ciudadano como vos y yo, jaja.
Te extraño, pitito :(. Todavía me cuesta acostumbrarme a que los viernes no te veo más